(NA) -- En los últimos diez años, el
maíz argentino fue el que más avanzó en materia de rendimientos a
nivel mundial, ya que su tasa de crecimiento de 2000 a 2010 fue
del 48,73 por ciento.
En ese período, el rendimiento promedio fue de 6700 kilos por
hectárea.
La media más alta se consiguió en 2009, con 8400 kilos por
hectárea, seguida por la cifra alcanzada en 2010, unos 8080 kilos
por hectárea.
Estos datos surgen de un informe del Programa de Inserción
Agrícola (PIA) encargado a la Asociación de Maíz y Sorgo Argentino
(Maizar) que en 484 páginas analizó, en detalle el mercado mundial
del maíz.
Estas cifras ubican a la Argentina en el noveno lugar en la
escala de países con mejores rendimientos en la producción de maíz.
De esta manera, se acorta la brecha respecto de los
rendimientos alcanzados por el principal productor mundial de
maíz, Estados Unidos, que genera el 40 por ciento de la producción.
En el mismo período, esa potencia incrementó su rendimiento en
un 19,43 por ciento, con un promedio de 9339 kilos por hectárea en
los diez años.
El logro argentino estuvo cerca de ser alcanzado por Brasil,
que llegó a mejorar sus rindes en el cultivo de maíz en un 45,73
por ciento.
Si bien la mejora fue notable, Brasil partía de un piso bajo,
ya que empezó el milenio con un rendimiento promedio de 2745 kilos
por hectárea y cerró el período 2000-2010 con una media de 3510
kilos por hectárea.
De todos modos, ni Argentina ni Estados Unidos ni Brasil, tres
de los grandes productores y exportadores mundiales de maíz, están
cerca del rendimiento conseguido por Kuwait.
Con un promedio de 20.143 kilos por hectárea, el país del Golfo
Pérsico obtuvo el mejor rinde promedio en diez años.
Cerca de esas cifras estuvieron Jordán, Israel y Chile.
Si bien se trata de países que siembran pequeñas áreas y cuyos
volúmenes son poco significativos en el total de producción
mundial, tratan de sacar la mayor ventaja posible a cada
centímetro de tierra, al aplicar la máxima tecnología disponible.
Sin embargo, estos casos no abundan.
En el estudio conjunto de PIA y Maizar, se puede observar que
son muy pocos los países en el mundo que obtienen rendimientos
medios o altos.
Especialmente al considerar que el maíz es el cultivo que más
se produce a nivel mundial y en la mayor cantidad de países, en
total 168.
"Es por eso, que la Argentina podría transformarse en un
proveedor de la tecnología necesaria para que el cultivo exprese
el máximo potencial de rendimiento como podrían ser los insumos,
el acopio, el transporte y el conocimiento integral de las más
modernas tecnologías", se advirtió.
maíz argentino fue el que más avanzó en materia de rendimientos a
nivel mundial, ya que su tasa de crecimiento de 2000 a 2010 fue
del 48,73 por ciento.
En ese período, el rendimiento promedio fue de 6700 kilos por
hectárea.
La media más alta se consiguió en 2009, con 8400 kilos por
hectárea, seguida por la cifra alcanzada en 2010, unos 8080 kilos
por hectárea.
Estos datos surgen de un informe del Programa de Inserción
Agrícola (PIA) encargado a la Asociación de Maíz y Sorgo Argentino
(Maizar) que en 484 páginas analizó, en detalle el mercado mundial
del maíz.
Estas cifras ubican a la Argentina en el noveno lugar en la
escala de países con mejores rendimientos en la producción de maíz.
De esta manera, se acorta la brecha respecto de los
rendimientos alcanzados por el principal productor mundial de
maíz, Estados Unidos, que genera el 40 por ciento de la producción.
En el mismo período, esa potencia incrementó su rendimiento en
un 19,43 por ciento, con un promedio de 9339 kilos por hectárea en
los diez años.
El logro argentino estuvo cerca de ser alcanzado por Brasil,
que llegó a mejorar sus rindes en el cultivo de maíz en un 45,73
por ciento.
Si bien la mejora fue notable, Brasil partía de un piso bajo,
ya que empezó el milenio con un rendimiento promedio de 2745 kilos
por hectárea y cerró el período 2000-2010 con una media de 3510
kilos por hectárea.
De todos modos, ni Argentina ni Estados Unidos ni Brasil, tres
de los grandes productores y exportadores mundiales de maíz, están
cerca del rendimiento conseguido por Kuwait.
Con un promedio de 20.143 kilos por hectárea, el país del Golfo
Pérsico obtuvo el mejor rinde promedio en diez años.
Cerca de esas cifras estuvieron Jordán, Israel y Chile.
Si bien se trata de países que siembran pequeñas áreas y cuyos
volúmenes son poco significativos en el total de producción
mundial, tratan de sacar la mayor ventaja posible a cada
centímetro de tierra, al aplicar la máxima tecnología disponible.
Sin embargo, estos casos no abundan.
En el estudio conjunto de PIA y Maizar, se puede observar que
son muy pocos los países en el mundo que obtienen rendimientos
medios o altos.
Especialmente al considerar que el maíz es el cultivo que más
se produce a nivel mundial y en la mayor cantidad de países, en
total 168.
"Es por eso, que la Argentina podría transformarse en un
proveedor de la tecnología necesaria para que el cultivo exprese
el máximo potencial de rendimiento como podrían ser los insumos,
el acopio, el transporte y el conocimiento integral de las más
modernas tecnologías", se advirtió.
