domingo, 20 de febrero de 2011

La historia sin fin de un trámite para conseguir el reintegro del trigo

(Especial de NA por Matilde Fierro)
La Sociedad Rural de Rosario (SRR) realizó el seguimiento del
trámite de un productor agropecuario santafesino para conseguir el
reintegro de las retenciones de trigo, una gesta que finalizó con
resultado negativo a pesar de un acuerdo entre el Ministerio de
Agricultura de la Nación y el de la Producción de Santa Fe.
   En marzo de 2010 el productor presentó los papeles en la
oficina de la ONCCA Rosario para recibir el reintegro de las
retenciones de trigo a 187 pesos por tonelada.
   Fue un año atrás cuando le dijeron que dentro de los 60 días
iba a tener depositado el importe en el CBU informado.
   En abril salió una resolución de la ONCCA en la cual le pedían
que presente una nueva documentación para informar otra vez el
CBU en dónde iban a realizar el depósito.
   Era junio cuando llevó los nuevos papeles para completar los ya
entregados que pedían cuando se reglamentó la resolución.
   Nuevamente le dijeron que dentro de los 60 días iba a recibir
el depósito. Es decir, ahora tenía como próxima fecha de cobro el
mes de agosto.
   "Todos los trámites que le solicitaban implicaban hojas y hojas
con información ya presentada y con las correspondientes firmas
certificadas por escribano o banco: Esto implicó disponer de mucho
tiempo para responder a estos trámites engorrosos y poco prácticos
para los productores y por supuesto, mayores gastos", consignó la
SRR.
   En el mes de octubre viajó a al Ministerio de Agricultura de la
Nación, revisaron su documentación y se le informó que estaban
trabados porque la mitad de los papeles "se habían perdido" en el
camino.
   Como había llevado copia de todo, comenzó de nuevo con
los trámites: le informaron que los iban a mandar a la AFIP y una
vez aprobado por esa oficina, cobraría el depósito.
   Durante los meses de octubre, noviembre y diciembre llamó
reiteradamente al Ministerio y le respondían que aún seguía
trabado en AFIP, sin explicarle el porqué. Ni en la propia AFIP
sabían las razones de este impedimento.
   A partir de diciembre no le atendieron más el teléfono,
mientras que ahora en febrero llamó al Ministerio y le informaron
que habían pasado fondos a la provincia de Santa Fe para que los
distribuya entre los productores que no fueron aprobados por AFIP,
claro sin darle explicación de por qué no fue aceptada pese a
tener toda la documentación y su situación legal en orden.
    La buena noticia fue que le iban a pagar la totalidad de
toneladas, ya que las suyas eran menos de 100.
   Sin embargo, y pese a la información brindada por el Ministerio
de Agricultura de que cobraría por el total de sus toneladas y al
acta acuerdo firmada entre los organismos oficiales de pagar a los
productores 130 pesos por tonelada, el reintegro prometido
contempla sólo 99,63 pesos por tonelada, sin saber la razón de ese
importante descuento y dónde queda esa diferencia.       
   De todos modos, el productor que puede ser un caso testigo
aún no cobró.
   Estos avatares ocurren mientras otros temas ocupan la atención
como el renovado embate de Eduardo Buzzi, titular de la
Federación Agraria (FAA), quien presenta en su discurso una Mesa
de Enlace opaca y debilitada en su enfrentamiento con Mario
Llambías, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
    Sin embargo la sucesión de Dardo Chiessa al frente del
Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA)
también promete un tironeo entre entidades, ya que la FAA busca
ese espacio que viene prometido a Coninagro.
    Por último, la Argentina concurrió a la reunión del grupo G-20
en París con la premisa de libre mercado, un ámbito donde se
quería fijar un techo al precio de la soja.
   La posición argentina es todo lo contrario a lo que aplica el
Gobierno en su propio país donde interviene y regula las
operaciones de trigo y maíz con las desventuras que acontecen a
productores como el santafesino de este relato.