domingo, 2 de enero de 2011

El 2010 fue un año sin soluciones para el trigo

(NA) -- El  trigo en el mercado mundial
termina un año muy prometedor en materia de precios con subas
en respuesta a la menor oferta, mientras que en Argentina el año
repite parte del contexto del 2009.
   Así lo consignó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su
último Informativo Semanal.
   "La diferencia entre el 2010 y 2009 en el mercado local está
dada por el aspecto productivo ya que los precios continúan
siendo la referencia ausente", se dijo.
   La campaña comercial actual comenzó con un aumento en el área
de cobertura del cereal y condiciones climáticas que acompañaron
para alcanzar niveles en materia de rinde.
   "Con la cosecha alcanzando el 75 por ciento de la superficie,
según datos oficiales al 30 de diciembre, se registran buenos
rendimientos en la mayor parte de las regiones que auguran una
producción del orden de los 13,5 millones de toneladas",
manifestó el análisis.
   La cifra oficial mencionada también coincidía con la
estimación de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires hasta antes
del jueves, cuando la entidad publicó un informe donde señala una
nueva proyección de cosecha del orden de 14,5 millones de
toneladas.
   Con la mejora en la producción, aumenta el saldo exportable
que "en teoría" acerca el mercado argentino a las cotizaciones
internacionales.
   En plena cosecha, la posibilidad de exportar más al mundo está
lejos de impactar en el mercado local que permanece ausente de
compradores.
   En el recinto de operaciones de la BCR desde hace más de un
mes que no se conocen negocios ni ofertas por parte de los
compradores.
   "Esta semana hubo rumores de que algunos exportadores
estuvieron pagando entre 205 y 210 dólares por tonelada de trigo
con entrega diferida de febrero a abril", advirtió la BCR.
   No se confirmaron negocios, pero del informe semanal de
compras, ventas y embarques del sector exportador se
desprende que en la semana finalizada el 22 de diciembre se
declararon compras por 202.900 toneladas.
   Este volumen se agrega a los negocios anteriores para acumular
compras de trigo por un total de 3,4 millones de toneladas.
   Lo declarado por el sector exportador se suma con las
declaraciones de compras de la industria que ascienden a un
millón de toneladas para analizar el trigo comercializado hasta
la fecha.
   En las últimas dos campañas a fines de diciembre se llevaba
comercializado el 32 por ciento de la producción mientras que en
años anteriores el volumen promedio ascendía al 50 por ciento de
la cosecha.
   La diferencia de las últimas dos campañas radica en la poca
actividad que muestra la demanda en plena época de cosecha.
   Por parte de la industria el ritmo de compras mantiene los
niveles del pasado pero la diferencia está en el sector
exportador que tiene limitado el volumen de ventas al exterior.
   Las autorizaciones de ROE Verde del cereal ascienden
a 3,72 millones de toneladas, con un aumento de 236.500 toneladas
en la semana pero tan solo un millón de toneladas más que el año
pasado a la misma fecha cuando en la campaña se obtuvo la cosecha
más baja de los últimos 35 años.
   Del volumen autorizado para exportar, el sector exportador
declara compradas 3,4 millones de toneladas sin considerar el
excedente que quedó de la campaña pasada.
   "El ritmo de los negocios al exterior es lento cuando estamos
en plena época de cosecha, provocando nuevamente como el año
pasado un cuello de botella: muchos quieren vender pero pocos
pueden comprar", coincidió la Bolsa rosarina.

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