(Especial para NA, por Guillermo Desiervi*) -- Podemos decir con orgullo que el año que finaliza ha
resultado altamente positivo para el MATba, no sólo en cuanto los
volúmenes comercializados en nuestros contratos, sino también en
lo que hace a los resultados económicos obtenidos, y lo que es más
importante, al posicionamiento de la Institución a nivel nacional
e internacional.
Los volúmenes totales se han incrementado en más de un 10 por
ciento, pero es bueno resaltar que este año se han batido todos
los records de la historia del MATba en trading de soja.
Hay un dato novedoso: el crecimiento en opciones ha sido
sustancialmente superior al de futuros.
Es indudable que los operadores reconocen a este instrumento
como el más adecuado para efectuar las coberturas cuando nos
encontramos inmersos en un "weather market", ya que la sequía
amenaza peligrosamente a la producción 2010-11.
Este mercado climático está dominando las cotizaciones, que de
todas maneras presentaban una tendencia alcista, producto del
incesante crecimiento de la demanda, así como de la inestabilidad
del dólar americano, moneda universalmente aceptada para expresar
el valor de los commodities.
El lanzamiento de las acciones del MATba al sistema de oferta
pública en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires representa un hito
de fundamental importancia: el Mercado a Término de Buenos Aires
deja de ser una sociedad cerrada, y se abre al público en general,
ya sean agentes como inversores, y el crecimiento en el valor de
cotización de sus acciones demuestra lo acertado de la decisión.
Recientemente el MATba ha adquirido una plataforma de
negociación electrónica de primer nivel internacional, que no
dudamos va a posicionarlo como líder indiscutido en Latinoamérica,
no sólo en cuanto a volúmenes, sino también en lo atinente a
tecnología, imprescindible para asegurar eficiencia en la
administración de los contratos.
En cuanto al futuro, no podemos dejar de analizarlo sin tener
en cuenta la errática política que en materia agropecuaria ha
instalado el gobierno.
La cuotificación de las exportaciones de trigo, en un sentido
totalmente arbitrario y contrario a la historia del último siglo
en Argentina, ha devenido en una disminución importante del área
sembrada, ya que este sistema produce un importante cuello de
botella en época de cosecha, resultando el productor agropecuario
el inmediato perjudicado.
El malestar de todo el sector es público y notorio.
No se descartan protestas más importantes en los próximos días,
así como posibilidad de denuncias penales en contra de
funcionarios públicos, acusados de mal desempeño de sus
funciones.
Y si bien el trigo ocupa el primer plano en este momento,
también se siente la amenaza sobre el maíz, ya que hasta el
momento los ROE autorizados no cubren las expectativas de los
operadores.
Las autoridades deberían comprender que nuestro país cuenta con
mercados institucionalizados y con herramientas que permitirían no
sólo la transparencia de la comercialización (el contrato MATba
Soja30 es el mejor exponente), sino las coberturas de precios y
volúmenes, que tornan totalmente innecesaria la regulación de las
exportaciones.
En este sentido, el diálogo de las Bolsas y Mercados con las
autoridades de aplicación es el único camino para lograr
desactivar los conflictos y encauzar a nuestro país de una vez por
todas, en la senda del crecimiento.
(*)Presidente del Mercado a Término de Buenos Aires, MATba.
domingo, 2 de enero de 2011
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