El Sindicato Obrero de la Industria del Pescado y de los Obreros Navales de Mar del Plata manifestó su deseo que el año nuevo llegue para las empresas pesqueras con nueva cuota de merluza, pero también con las cuentas de las obras sociales al día.
Como los tesoreros y revisores de cuentas de cada sindicato advirtieron que los números, más que al día, están en rojo con algunas empresas y luego de solicitar repetidamente que salden las deudas, en simultáneo elevaron sendas notas al Consejo Federal Pesquero al que le advirtieron de la situación y le solicitaron que se cumpla con lo que establece el Régimen General de CITC.
Al momento de asignar las cuotas, el CFP estableció obligaciones fiscales y laborales para las firmas armadoras, así como también obligaciones previsionales, según lo dispuesto en el párrafo 87 del Acta Nº49 del propio CFP, de noviembre del año pasado.
La norma establece que para la asignación de la correspondiente cuota, las empresas deben exhibir un certificado de Libre Deuda firmado por los gremios marítimos y portuarios. En un principio hasta se dijo que el formulario estaría subido a la página del CFP para que haya cierta uniformidad al momento de confeccionar el libre deuda, aunque nunca se hizo.
“…disponer lo pertinente para el efectivo cumplimiento de lo establecido en el régimen de cuotificación, que prevé estrictamente el acatamiento a los pagos del sistema de obra social, en lo ateniente a aportes y contribuciones respecto de los trabajadores dependientes de cada empresa operadora del rubro”, señala un párrafo de la nota publicada por la revista Puerto, y que fue ingresada al CFP el 16 de diciembre pasado.
“Esta organización gremial ha observado que distintas empresas de Mar del Plata incumplen la normativa reglamentaria y trabajan con absoluta normalidad, ello en franca violación de las disposiciones legales vigentes”, subraya a continuación la nota remitida por Cristina Ledesma, secretaria general del SOIP.
En el gremio de los obreros navales revisan las cuentas y tienen problemas con la empresa Daulias, Piea, del Grupo Chichilo y algunos buques de Costa Brava y Mattera, a cuyos afiliados se les liquida mal el aporte de obra social.
El planteo de la situación ante el CFP les dio rápidos resultados. A las pocas horas de haber ingresado la nota al cuerpo de concejeros, desde la empresa Moscuzza enviaron el cheque para ponerse al día.
La deuda con las obras sociales vinculadas a gremios marítimos, como los aportes sindicales, es frecuente entre las empresas pesqueras. Daniel Acha, del SICONARA, oportunamente ha reconocido no saber a qué monto ascendía la misma. El SOMU también lucha cotidianamente para achicar la brecha de modo de poder prestar un mejor servicio, al igual que la Asociación de Capitanes.
Lo que se desconoce por estas horas es si también denunciarán la situación ante el CFP como para que las empresas con deudas no reciban la cuota de merluza 2011.
Como los tesoreros y revisores de cuentas de cada sindicato advirtieron que los números, más que al día, están en rojo con algunas empresas y luego de solicitar repetidamente que salden las deudas, en simultáneo elevaron sendas notas al Consejo Federal Pesquero al que le advirtieron de la situación y le solicitaron que se cumpla con lo que establece el Régimen General de CITC.
Al momento de asignar las cuotas, el CFP estableció obligaciones fiscales y laborales para las firmas armadoras, así como también obligaciones previsionales, según lo dispuesto en el párrafo 87 del Acta Nº49 del propio CFP, de noviembre del año pasado.
La norma establece que para la asignación de la correspondiente cuota, las empresas deben exhibir un certificado de Libre Deuda firmado por los gremios marítimos y portuarios. En un principio hasta se dijo que el formulario estaría subido a la página del CFP para que haya cierta uniformidad al momento de confeccionar el libre deuda, aunque nunca se hizo.
“…disponer lo pertinente para el efectivo cumplimiento de lo establecido en el régimen de cuotificación, que prevé estrictamente el acatamiento a los pagos del sistema de obra social, en lo ateniente a aportes y contribuciones respecto de los trabajadores dependientes de cada empresa operadora del rubro”, señala un párrafo de la nota publicada por la revista Puerto, y que fue ingresada al CFP el 16 de diciembre pasado.
“Esta organización gremial ha observado que distintas empresas de Mar del Plata incumplen la normativa reglamentaria y trabajan con absoluta normalidad, ello en franca violación de las disposiciones legales vigentes”, subraya a continuación la nota remitida por Cristina Ledesma, secretaria general del SOIP.
En el gremio de los obreros navales revisan las cuentas y tienen problemas con la empresa Daulias, Piea, del Grupo Chichilo y algunos buques de Costa Brava y Mattera, a cuyos afiliados se les liquida mal el aporte de obra social.
El planteo de la situación ante el CFP les dio rápidos resultados. A las pocas horas de haber ingresado la nota al cuerpo de concejeros, desde la empresa Moscuzza enviaron el cheque para ponerse al día.
La deuda con las obras sociales vinculadas a gremios marítimos, como los aportes sindicales, es frecuente entre las empresas pesqueras. Daniel Acha, del SICONARA, oportunamente ha reconocido no saber a qué monto ascendía la misma. El SOMU también lucha cotidianamente para achicar la brecha de modo de poder prestar un mejor servicio, al igual que la Asociación de Capitanes.
Lo que se desconoce por estas horas es si también denunciarán la situación ante el CFP como para que las empresas con deudas no reciban la cuota de merluza 2011.
Fuente: El Diario de Madryn