La polémica acerca de la calidad de los lácteos continúa en China. Ante las acusaciones de vender leche contaminada con arsénico, Nestlé asegura que sus productos son seguros y que no ponen en riesgo la vida de nadie. Los alimentos para bebes, los más desprestigiados, han sido sometidos a rigurosos estudios de los que han salido bien librados.
"Nuestros productos son completamente seguros para el consumo", manifestó Nestlé China en un comunicado divulgado este martes, en respuesta a informes publicados con anterioridad, que arrojan dudas sobre la calidad de los productos para bebés según lo publicó el rotativo local en inglés China Daily.
"Los productos de Nestlé mencionados en estos informes no son ni fabricados ni vendidos en China y todos los alimentos para bebes producidos y comerciados en China están plenamente conformes con las regulaciones y estándares de este país", dice la declaración, citada por el periódico.
El origen de la polémica: Estudios suecos encontraron tóxicos
Un análisis imperativo de alimentos para bebes realizado por investigadores suecos halló que algunos productos utilizados para destetar a los pequeños contienen niveles "alarmantes" de contaminantes tóxicos, como arsénico, plomo y cadmio, informó a principios de semana el periódico Daily Telegraph del Reino Unido.
El informe advierte de que los alimentos en cuestión, como las gachas de arroz, fabricados por una serie de conocidos productores de alimentos para bebés como Nestlé y Organix, pueden incrementar la exposición a arsénico de los pequeños en hasta 50 veces comparado con la cantidad a la que están expuestos mientras son amamantados, lo cual aumenta el riesgo de contraer cáncer.
Nestlé se defiende
No obstante, el comunicado de Nestlé insiste en que sus productos son seguros para los bebés y que cumplen con todos los estándares europeos y de las regiones nórdicas de ese continente.
La gerente del departamento de publicidad de Nestlé China, He Tong, aseguró a China Daily que todos los productos de su empresa son sometidos a supervisiones y exámenes por parte de las autoridades chinas, antes de salir al mercado. "La calidad y seguridad de nuestros productos son nuestra máxima prioridad", subrayó.
Nestlé quiere recuperar su prestigio
A su vez, Wang Dingmian, ex vicepresidente de la Asociación de Productores Lácteos de la provincia meridional china de Guangdong, recordó que Nestlé es una de las empresas del sector más importantes del mercado chino.
"La compañía ingresó más de 2.000 millones de yuanes (US$ 300 millones) anuales en los últimos años", destacó.
Declaraciones de expertos en salud alimentaria
He Jiguo, profesor de la Facultad de Ciencias Alimentarias e Ingeniería de la Nutrición de la Universidad de Agricultura de China, dijo que la ciudadanía no tiene porque inquietarse porque los niveles de arsénico en los productos de la empresa cumplen con los estándares nacionales.
Sin embargo, Wang admitió que el consumo prolongado de cantidades acumuladas de arsénico puede afectar la salud de los bebés.
Industria y Comercio también toman la palabra
Una portavoz de la administración de industria y comercio de Beijing afirma, citada por el rotativo, que la administración no ha recibido informes o quejas sobre niveles elevados de arsénico en alimentos para bebés, recientemente.
En diciembre pasado, la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena de China reveló que un total de 670 toneladas de productos lácteos importados entre marzo y agosto de 2010 eran de calidad inferior.
De entre todos ellos, el 70 por ciento eran fórmulas para bebés.
Club Darwin
"Nuestros productos son completamente seguros para el consumo", manifestó Nestlé China en un comunicado divulgado este martes, en respuesta a informes publicados con anterioridad, que arrojan dudas sobre la calidad de los productos para bebés según lo publicó el rotativo local en inglés China Daily.
"Los productos de Nestlé mencionados en estos informes no son ni fabricados ni vendidos en China y todos los alimentos para bebes producidos y comerciados en China están plenamente conformes con las regulaciones y estándares de este país", dice la declaración, citada por el periódico.
El origen de la polémica: Estudios suecos encontraron tóxicos
Un análisis imperativo de alimentos para bebes realizado por investigadores suecos halló que algunos productos utilizados para destetar a los pequeños contienen niveles "alarmantes" de contaminantes tóxicos, como arsénico, plomo y cadmio, informó a principios de semana el periódico Daily Telegraph del Reino Unido.
El informe advierte de que los alimentos en cuestión, como las gachas de arroz, fabricados por una serie de conocidos productores de alimentos para bebés como Nestlé y Organix, pueden incrementar la exposición a arsénico de los pequeños en hasta 50 veces comparado con la cantidad a la que están expuestos mientras son amamantados, lo cual aumenta el riesgo de contraer cáncer.
Nestlé se defiende
No obstante, el comunicado de Nestlé insiste en que sus productos son seguros para los bebés y que cumplen con todos los estándares europeos y de las regiones nórdicas de ese continente.
La gerente del departamento de publicidad de Nestlé China, He Tong, aseguró a China Daily que todos los productos de su empresa son sometidos a supervisiones y exámenes por parte de las autoridades chinas, antes de salir al mercado. "La calidad y seguridad de nuestros productos son nuestra máxima prioridad", subrayó.
Nestlé quiere recuperar su prestigio
A su vez, Wang Dingmian, ex vicepresidente de la Asociación de Productores Lácteos de la provincia meridional china de Guangdong, recordó que Nestlé es una de las empresas del sector más importantes del mercado chino.
"La compañía ingresó más de 2.000 millones de yuanes (US$ 300 millones) anuales en los últimos años", destacó.
Declaraciones de expertos en salud alimentaria
He Jiguo, profesor de la Facultad de Ciencias Alimentarias e Ingeniería de la Nutrición de la Universidad de Agricultura de China, dijo que la ciudadanía no tiene porque inquietarse porque los niveles de arsénico en los productos de la empresa cumplen con los estándares nacionales.
Sin embargo, Wang admitió que el consumo prolongado de cantidades acumuladas de arsénico puede afectar la salud de los bebés.
Industria y Comercio también toman la palabra
Una portavoz de la administración de industria y comercio de Beijing afirma, citada por el rotativo, que la administración no ha recibido informes o quejas sobre niveles elevados de arsénico en alimentos para bebés, recientemente.
En diciembre pasado, la Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena de China reveló que un total de 670 toneladas de productos lácteos importados entre marzo y agosto de 2010 eran de calidad inferior.
De entre todos ellos, el 70 por ciento eran fórmulas para bebés.
Club Darwin