viernes, 25 de febrero de 2011

Se complica el comercio de frutas con Brasil

El Gobierno rionegrino pidió la intervención de la Nación para solucionar un grave problema que afecta a las exportaciones de peras y manzanas frescas a Brasil
   Este país decidió unilateralmente retirar tres de los cuatro inspectores que manda al Alto Valle de Río Negro y Neuquén para controlar en origen el estado fitosanitario de la fruta que le compra a la Argentina.
  
   Si bien no se dieron a conocer oficialmente los motivos del retiro de los técnicos brasileños, en medios vinculados a la Corporación Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) se dijo que es «en represalia por las trabas a las importaciones que le impuso el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno».

   Ayer, después de varios días de detención en la frontera pudieron seguir viaje unos 17 camiones frigoríficos que transportaban carga hacia varios destinos del Brasil. Unas horas antes, el ministro de la Producción de Río Negro, Juan Accatino, le reclamó a su par de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, su inmediata intervención «ante el retiro de tres de los cuatro inspectores fitosanitarios brasileños a cargo del Sistema de Mitigación de Riesgo (SMR)». Este mecanismo de control binacional funciona desde el año 2002 y permitió superar las restricciones fitosanitarias para las frutas rionegrinas que complicaban el comercio bilateral.
  
   En paralelo, el secretario de Fruticultura, Carlos Colavita, propuso que, «de no poder dar marcha atrás con la medida, se habilite a los servicios técnicos argentinos para compensar el impacto a la operatividad del sistema que impone contar con un solo inspector en una región que cuenta con dos resguardos fitosanitarios (Villa Regina, en Río Negro, y Centenario en Neuquén)».
  
   También se solicita «en forma urgente» un encuentro con Domínguez; autoridades del SENASA; Cancillería; Gobiernos de Río Negro, Neuquén y Mendoza, y representantes del sector privado para trabajar el tema.
  
   Pero recién la semana que viene podría realizarse una reunión de funcionarios argentinos y brasileños para destrabar la situación. Brasil es un destino estratégico a lo largo del año para las exportaciones de fruta, que alcanzan un volumen cercano a las 200.000 toneladas y, como tal, reacciona en defensa de su interés comercial afectado por las medidas de Moreno. Hasta ayer, el Gobierno de Brasil no dio señales de revisar esta medida de supervisar las cargas en origen.
Ámbito Financiero