domingo, 20 de febrero de 2011

La Argentina podría aprovechar mercados que deje vacantes China en la exportación de maíz

(NA) -- La posible desaparición de
China como país exportador de maíz, según un informe del Programa
de Inserción Agrícola (PIA) encargado a la Asociación de Maíz y
Sorgo Argentino (Maizar) presenta ventajas a la Argentina que
puede también aprovechar mercados vacantes.
   Tanto Malasia como República de Corea son mercados
tradicionales de la Argentina y a los que vende China el cereal.  
   En Corea, la tasa de autoabastecimiento de maíz es casi nula y
depende prácticamente en un ciento por ciento de las importaciones
del cereal para mantener su industria.
   Si bien, en los últimos dos años, Corea ha disminuido sus
importaciones desde la Argentina en un 75 por ciento, ésta sería
una buena oportunidad para recuperar ese país como cliente.
   También es relevante negociar un mejor acceso al mercado
japonés que no es un cliente tradicional de las exportaciones de
maíz argentino.
   Japón es el primer importador mundial de maíz y se abastece
principalmente de las exportaciones estadounidenses.
   "De todos modos, dada la desaparición de China como uno de sus
proveedores de maíz, la Argentina podría tener una oportunidad:
Las empresas japonesas comenzaron a considerar que no es
conveniente tener a Estados Unidos como único exportador de maíz
por el auge que vive la producción de etanol en ese país y el
aumento del precio que provoca en el grano", aseguró el informe.
   Como son limitados los países que pueden proveer los volúmenes
de maíz que demanda Japón, la atención se centra en Argentina y
Brasil.
   Irán es un país cuyo porcentaje de autoabastecimiento es del 31
por ciento y si bien se estima que aumentará su producción de
maíz, también se espera que aumente el consumo.
   La mayor parte del cereal la importa desde Brasil.
   Sin embargo, en 2008 comenzaron a importar desde Argentina.
   En el caso de Indonesia, si bien es un país que con el tiempo
logró un autoabastecimiento casi total, sus importaciones están
muy atomizadas, así que podría ser factible para la Argentina
participar de ellas.
   "La exportación de maíz, más que la de cualquier otro grano,
depende de una estrategia de negociación", se destacó.
   Dado que se trata del cultivo más producido a nivel mundial,
que se siembra en 168 países en todos los continentes.
   "Si bien no todos los Estados productores llegan a ser
autosuficientes en la provisión interna de maíz, es necesario
negociar para acceder a los países importadores", se aclaró.
   También se explicó que no es conveniente "ceder mercados a
nuestros principales competidores, Brasil y Estados Unidos, que
han demostrado una política de comercio exterior más agresiva".
   "De todos modos, la cadena de valor de maíz puede sacar otra
ventaja de la expansión de la producción del cereal en el mundo y
convertirse en proveedora de la tecnología necesaria para que el
cultivo exprese el máximo potencial de rendimiento", se destacó.  
   Esto se traduce en la exportación de insumos y el  conocimiento
integral de las más modernas tecnologías y además sobre el acopio
y el transporte.