martes, 15 de marzo de 2011

Buscan achicar distancias entre UE y Mercosur por el acceso de la producción primaria

El Mercosur reclama concesiones para aumentar el acceso al mercado europeo de los envíos de productos agrícolas y ganaderos
(NAP) La Unión Europea (UE) y los países del Mercosur celebran desde ayer, en Bruselas, una nueva ronda de negociaciones, con el fin de lograr un acuerdo de asociación, si bien no estarán en juego todavía ofertas comerciales de acceso de sus productos a los distintos mercados.
Los bloques negociadores muestran su preocupación por los temas agrícolas y ganaderos, en especial por la carne de vacuno.
La parte normativa del futuro tratado comercial incluido en el amplio acuerdo de asociación; es decir, en las reglas que se aplicarán a capítulos como las barreras técnicas al comercio, la competencia o el origen de los productos, centrarán el debate, se informó en fuentes europeas.
Según informó la Agencia EFE, en la sesión de trabajo, que tendrá lugar de lunes a viernes, “no se discutirá ninguna oferta de acceso a los mercados por el momento”, aunque reconocieron que se hablará de concesiones para productos específicos como la carne.
El Mercosur –bloque con países líderes mundiales en la producción de carne– reclama concesiones para aumentar el acceso al mercado europeo de los envíos de productos agrícolas y ganaderos.
El Comité de Organizaciones Agrarias y Cooperativas Europeas (Copa-Cogeca) publicó la semana pasada un informe, realizado en varios países de la UE, que asegura que la liberalización de importaciones suramericanas ocasionaría un “colapso” del sector vacuno europeo, volatilidad de los precios y pérdidas de 25.000 millones de euros.
La Eurocámara en pleno se sumó la pasada semana, en Estrasburgo, a las críticas, al aprobar un informe en el que considera que las negociaciones pueden implicar concesiones agrícolas.
El Parlamento europeo pidió, además, la elaboración de un estudio previo sobre el impacto del tratado antes de concluir las negociaciones, y lamentó que la Comisión Europea decidiera reanudarlas en mayo del 2010, tras permanecer estancadas varios años.
En cambio, para la Comisión Europea es “exagerado” sugerir que un acuerdo destruiría la industria europea del vacuno, según el portavoz comunitario de Comercio, John Clancy, quien recordó que la política agraria garantiza apoyo a los productores para “cubrir la diferencia de costos”.
A los países del bloque suramericano les preocupan, por su parte, los subsidios agrícolas en Europa, aunque la Comisión Europea ya ha manifestado que se ha esforzado por limitarlos, y que los que hay en vigor constituyen una pequeña porción permitida por la Organización Mundial del Comercio