La compañía del grupo Arcor recibió el premio a la Excelencia por haber alcanzado los máximos estándares de calidad en su planta de producción.
Cartocor, la empresa de envases de cartón del grupo Arcor, recibió el Premio a la Excelencia que otorgó el Instituto Japonés de Mantenimiento de Plantas.
Este premio significa para Cartocor haber alcanzado los máximos estándares en el manejo de una planta industrial, algo que los japoneses definieron como TPM o sistema de
gestión de Mantenimiento Productivo Total.
La meta del TPM es incrementar notablemente la productividad y al mismo tiempo levantar la moral de los trabajadores y su satisfacción por el trabajo realizado. Sus ejes
básicos son: el compromiso total por parte de los altos mandos de la empresa, el personal debe tener la suficiente delegación de autoridad para implementar los cambios que
se requieran, se debe tener un panorama a largo plazo ya que su implementación puede tomar desde uno hasta varios años y también deberá tener lugar un cambio en la
mentalidad y actitud de toda la gente involucrada en lo que respecta a sus nuevas responsabilidades.
El concepto TPM se inició en Japón a poco de terminar la Segunda Guerra Mundial. Consistió en controlar la calidad de los productos de una empresa durante la manufactura
mediante análisis estadísticos. Al combinarse los procesos estadísticos y sus resultados directos en la calidad con la ética de trabajo propia del pueblo japonés, se creó toda
una cultura de la calidad que desembocó en una nueva forma de vivir y un nuevo estilo de manejar la industria.
En la actualidad, ha quedado demostrada su eficacia no sólo en plantas industriales, también en la construcción, el mantenimiento de edificios, los transportes y otras
actividades como los deportes. Los empleados de todos los niveles deben ser educados y convencidos de que TPM no es "el programa del mes", sino que es un plan en el
que los más altos niveles gerenciales se hallan comprometidos para siempre, incluida la gran inversión de tiempo mientras que dure su implementación. Si cada quien se
compromete como debe, los resultados serán excelentes comparados con la inversión realizada.
El Premio a la Excelencia fue recibido por el ingeniero industrial Nicolás Gómez, quien viajó a Japón para asistir a la ceremonia que se realizó en el ICC (International
Conference Center) de la ciudad de Kyoto donde estuvieron representantes de un centenar de empresas de más de 30 países.
Otras firmas que obtuvieron esta distinción en años anteriores fueron: Ford, Kodak y Harley Davidson por haber alcanzado los máximos estándares de producción.
El civismo
Cartocor, la empresa de envases de cartón del grupo Arcor, recibió el Premio a la Excelencia que otorgó el Instituto Japonés de Mantenimiento de Plantas.
Este premio significa para Cartocor haber alcanzado los máximos estándares en el manejo de una planta industrial, algo que los japoneses definieron como TPM o sistema de
gestión de Mantenimiento Productivo Total.
La meta del TPM es incrementar notablemente la productividad y al mismo tiempo levantar la moral de los trabajadores y su satisfacción por el trabajo realizado. Sus ejes
básicos son: el compromiso total por parte de los altos mandos de la empresa, el personal debe tener la suficiente delegación de autoridad para implementar los cambios que
se requieran, se debe tener un panorama a largo plazo ya que su implementación puede tomar desde uno hasta varios años y también deberá tener lugar un cambio en la
mentalidad y actitud de toda la gente involucrada en lo que respecta a sus nuevas responsabilidades.
El concepto TPM se inició en Japón a poco de terminar la Segunda Guerra Mundial. Consistió en controlar la calidad de los productos de una empresa durante la manufactura
mediante análisis estadísticos. Al combinarse los procesos estadísticos y sus resultados directos en la calidad con la ética de trabajo propia del pueblo japonés, se creó toda
una cultura de la calidad que desembocó en una nueva forma de vivir y un nuevo estilo de manejar la industria.
En la actualidad, ha quedado demostrada su eficacia no sólo en plantas industriales, también en la construcción, el mantenimiento de edificios, los transportes y otras
actividades como los deportes. Los empleados de todos los niveles deben ser educados y convencidos de que TPM no es "el programa del mes", sino que es un plan en el
que los más altos niveles gerenciales se hallan comprometidos para siempre, incluida la gran inversión de tiempo mientras que dure su implementación. Si cada quien se
compromete como debe, los resultados serán excelentes comparados con la inversión realizada.
El Premio a la Excelencia fue recibido por el ingeniero industrial Nicolás Gómez, quien viajó a Japón para asistir a la ceremonia que se realizó en el ICC (International
Conference Center) de la ciudad de Kyoto donde estuvieron representantes de un centenar de empresas de más de 30 países.
Otras firmas que obtuvieron esta distinción en años anteriores fueron: Ford, Kodak y Harley Davidson por haber alcanzado los máximos estándares de producción.
El civismo